Nunca Jamás
“ La filosofía de Nunca Jamás es la de un vino que no quiere crecer, buscando así la complejidad en la fruta. Para ello, vendimiamos las zonas altas de cada viñedo ya que son las más pobres. Por su espíritu joven, la etiqueta de este vino se reinventa cada año en manos de diferentes personas”
Monovarietal de uva Tempranillo, procedente de viñedos de más de 40 años de edad.
Se elabora directamente en barricas de 225 litros de roble francés durante 14 días a bajas temperaturas, con 4-5 bazuqueos diarios, donde realiza, primero, la fermentación alcohólica, y luego la fermentación maloláctica, buscando complejidad aromática.
Finalmente, permanece bajo crianza en barricas de roble nuevo francés durante 8 meses.
Nota de cata:
- Color: capa alta, con irisaciones violetas tirando a azules.
- Aroma: muy potente donde se aprecia la esencia del vino de Rioja Alavesa, sobre todo, con mucha fruta roja y regaliz. La crianza en barrica aparece únicamente como potenciador de estos matices.
- En boca: potente, joven y fresco y muy frutal.
Maridaje: Sopas y preparados de verdura, aves, carnes a la parrilla, guisos y estofados.
Temperatura recomendada de servicio: 16- 18ºC.
Datos técnicos, Vino Nunca Jamás
- Bodega: Javier San Pedro Ortega
- Tipo de Uva: Tempranillo 100%
- Volumen: 0,75 l.
- Añada: 2.018
- Crianza: 8 meses en barricas nuevas de roble francés, más el tiempo de fermentación alcohólica y malolática
- D.O.: Rioja
- Graduación: 14 grados
- Edad viñedo: más de 40 años
- Tipo Terreno: calcáreo con fondo arcilloso
Opiniones y Comentarios del Vino
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La Bodega
Javier San Pedro Ortega
Javier San Pedro Ortega es natural de Laguardia y enólogo por tradición y vocación. Procede de una familia de viticultores, siendo la quinta generación de la familia que elabora sus propios vinos con uvas procedentes de sus viñedos.
En la vendimia de 2013, tras ocho años aportando su toque personal a los vinos de la bodega familiar, decidió emprender su proyecto personal, joven e innovador, basado en dos gamas de vinos bien diferenciadas. Por un lado, la gama Cueva de Lobos, que se define con vinos divertidos, aromáticos y de corte moderno; y la gama Viuda Negra, que pretende recuperar viejos viñedos de la zona obteniendo la máxima calidad de cada parcela. Sin olvidar su vino Anahí, un blanco semidulce creado y elaborado en homenaje a su madre.
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